Gripe Porcina

La Gripe Porcina es una enfermedad respiratoria de origen viral que afecta a los cerdos. De hecho, existen frecuentemente brotes de gripe entre estos animales.
Hoy está bajo vigilancia extrema la propagación de los virus de la gripe porcina de persona a persona. Anteriormente esta transmisión fue limitada y no se había mantenido entre más de tres personas. Hoy vemos que la situación ha cambiado.
Aunque el nombre pueda inducir la confusión, la Gripe Porcina no se transmite por los alimentos. No es posible contraer gripe porcina por comer carne de cerdo o sus productos derivados. No hay riesgos si se come carne de cerdo y sus derivados que han sido manipulados y cocinados de manera adecuada.
Sin embargo, los microbios se pueden propagar cuando una persona toca algo contaminado con ellos y luego se toca los ojos, la nariz o la boca. Las gotitas que provienen de la tos o de un estornudo de las personas infectadas se propagan por el aire. Los microbios también pueden propagarse cuando una persona toca las gotitas provenientes de secreciones respiratorias de otra persona en una superficie como un escritorio y después se toca sus propios ojos, boca o nariz antes de lavarse las manos.
Algunos virus y bacterias pueden vivir dos horas o más en superficies como mesas de cafeterías, manijas de puertas y escritorios.
El lavado frecuente de las manos ayudará a reducir las posibilidades de contaminarse a través de estas superficies comunes por este u otros microbios que puedan estar presentes.
Por esta razón también debe apartarse al trabajador de sus tareas cuando existan signos o antecedentes inmediatos de enfermedad.
Extractado de Colegio de Farmacéuticos de la Provincia de Buenos Aires.